La experiencia y los conocimientos del equipo vitivinícola de Sacha Lichine contribuyeron a la elaboración de rosados Côtes-de-Provence de máxima calidad, consiguiendo establecerlos como productos de lujo en todo el mundo.
La finca de Château d’Esclans se extiende por 427 hectáreas, de las cuales 140 hectáreas están plantadas con viñedos AOP Côtes de Provence. Como accionista mayoritario, Moët Hennessy trabaja junto a Sacha Lichine, presidente de Château d’Esclans, que supervisa la propiedad y gestiona su desarrollo futuro. Lichine adquirió Château d’Esclans en 2006 y al poco tiempo decidió centrar la producción de la bodega en los vinos rosados de muy alta gama.
La experiencia y los conocimientos del equipo vitivinícola de Sacha Lichine contribuyeron a la elaboración de rosados Côtes-de-Provence de máxima calidad, consiguiendo establecerlos como productos de lujo en todo el mundo. Las principales uvas cultivadas en la propiedad, garnacha y vermentino, cubren varios suelos complementarios, lo cual permite lograr vinos de incomparable complejidad y refinamiento. Estas parcelas de vino rosado se vinifican de la misma forma que los vinos más finos y se crían en demi-muids de roble (barricas de 500 litros).
Como resultado de esta búsqueda de la calidad, los vinos rosados y la división de vinificación de Château d’Esclans son reconocidos como referencia internacional y han conquistado los Estados Unidos como líderes en su categoría. Mediante el Garrus, el vino rosado de prestigio más reconocido del mundo, el Whispering Angel, el rosado francés más vendido en los Estados Unidos o Rock Angel, el sofisticado hermano mayor del Whispering, Sacha Lichine logró crear una colección clave para conocedores de rosados de la Provenza reconocidos con numerosos premios.